Todo comenzó en un curso de nivología y seguridad impartido por el IGC y Pau de Dablam Esports. Después de unas cuantas llamadas marcho con Albert y Raúl y allí nos esperan Mollu y Tato. Las previsiones son excelentes, lleva 2 días nevando y Mollu y Tato se encargan de engorilarnos un poco más si cabe. Me despierto algo ansioso y bajo con Albert en busca de una Boulangerie para cargarnos de calorías. Todo sabe a gloria. Son las 7:00am.
Después de desayunar nos juntamos con Pau y cogemos número para subir al teleférico de l'Aiguille du Midi. Hace un día explendido y el Mont Blanc nos empequeñece.
Llega nuestro turno y los nervios crecen por momentos. Son muchas las ganas de descender por la arista de l'Aiguille du Midi. En la cola nos mezclamos entre la fauna local y turistas atraidos por el descenso del Vallée Blanche.
Una vez arriba cruzamos la pasarela y subimos al piso superior. La altura se nota y me hace sentir algo extraño. Estamos a 3842m y el espéctaculo es grandioso Les Grand Jorasses, Mont Blanc y Chamonix a nuestros pies.
Les Grandes Jorasses |
Las condiciones en la arista son buenas y no nos calzamos los crampones aunque Pau nos encuerda. Un pequeño resbalónsupone una caída casi vertical de 1000m hasta el Plan de l'Aiguille. Voy primero y no puedo sacar la cámara. ¡En la última entrega prometo fotos de la arista!
Una vez abajo nos ponemos el material y nos dirigimos hacia el Petit Envers Du Plan. Variante de la bajada por el Glacier du Géant. Descendemos sobre 30 cm de polvo ratoneando entre seracs. Un vistazo atrás.
Una vez abajo subimos por las escaleras que nos llevarán a Le Montenvers para coger el tren que nos transportará de vuelta a Chamonix. Un par de placas de información nos recuerdan el retroceso que están sufriendo los glaciares.
Llegamos a Chamonix y volvemos a coger el teleférico y esta vez nos bajamos en la estación intermedia del Plan de L'Aiguille. Hacemos una larga diagonal que da acceso a una gran pala cargadísima. Un regalo inesperado.Engorile máximo y al lío. Acabamos en un bosque abierto petado de powder. Faceshot por aquí, pillows por allá. Estamos en abril y la nieve transforma según avanzamos hasta que nos tenemos que quitar el material. Seguimos por el bosque con un sólo objetivo: ¡birra!
La tarde la pasamos entre toda clase de nudos: gasas, ochos,ochos reseguidos, dinámico, ballestrinque y me doy cuenta lo pez que soy. Se hace tarde y nos vamos a piltrar, mañana nos moveremos hacia Grand Montets y veremos que tal se nos da el Pas du Chevre.
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